La Unión Europea ha pospuesto la firma del acuerdo comercial con Mercosur al 12 de enero en Paraguay, aplazando un mes el evento previsto para este sábado en Brasil. La decisión responde a las masivas protestas de organizaciones agrarias europeas y al rechazo de Francia e Italia, que han frenado el pacto negociado durante más de 20 años.
La presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, anunció el jueves por la tarde la postergación ante la imposibilidad de lograr la mayoría cualificada necesaria entre los Estados miembros. El acuerdo requiere el respaldo de al menos 15 países que representen el 65% de la población de la Unión.
Las organizaciones agrarias valencianas Unió Llauradora y AVA-Asaja celebraron el bloqueo como una victoria de la presión continua del campo. Unos 20.000 agricultores participaron en las protestas de Bruselas, donde se congregaron representantes de las 40 principales organizaciones agrarias de los 27 Estados miembros.
Cítricos reconocidos como producto sensible
La Comisión Europea aprobó nuevas cláusulas de salvaguardia que incluyen por primera vez los cítricos entre los productos sensibles, junto a aves de corral, carne de vacuno, arroz, miel, huevos, ajo, etanol y azúcar. El umbral para activar medidas provisionales se fijó en un aumento del 8% en los volúmenes de importación o una caída del 8% en los precios.
Carles Peris, secretario general de Unió, valoró la medida con cautela: «Incluir los cítricos como producto sensible es una pequeña victoria, aunque somos conscientes que las cláusulas de salvaguardia para productos en fresco no son demasiado eficientes porque cuando se detecta un aumento de las importaciones o una bajada de precios superior al establecido, el daño ya está hecho, pero bueno ya es un avance».
Exigencias al Gobierno español
Cristóbal Aguado, presidente de AVA-Asaja, instó al Ejecutivo español a seguir el ejemplo de Francia e Italia y rechazar el acuerdo. «Ya va siendo hora de que nuestro gobierno central se entere de que debe defender a los agricultores españoles y no a los de fuera. El tratado con Mercosur, tal como está redactado, sin un estudio de impacto real y objetivo, añadirá más competencia desleal como ya han hecho anteriormente los acuerdos de Sudáfrica, Marruecos o Egipto», afirmó.
Aguado advirtió sobre los riesgos para productores y consumidores europeos: «No queremos que entre a la Unión Europea, por ejemplo, carne con hormonas que aquí tenemos prohibidas. Porque al principio nos arruinaremos los productores europeos, pero al final los que lo vamos a pagar somos todos los consumidores europeos: en precio, en calidad y en seguridad alimentaria».
El aplazamiento otorga tiempo adicional a la primera ministra italiana, Giorgia Meloni, quien consideraba prematura la firma de este sábado pero manifestó su disposición a suscribirlo más adelante si se atienden las demandas de los agricultores. El acuerdo comercial entre la UE y los países de Mercosur (Brasil, Argentina, Uruguay y Paraguay) lleva en negociación más de dos décadas.
Nota: Este artículo fue creado con Inteligencia Artificial (IA).





