Los bomberos de los estados alemanes de Turingia, Sajonia y Brandeburgo han continuado trabajando este domingo para controlar los incendios forestales que afectan a varias zonas boscosas. Turingia se ha convertido en la principal zona afectada, donde las autoridades han declarado el estado de crisis pese a una ligera mejora de la situación.
"A partir de esta tarde, miramos hacia el futuro con un poco más de optimismo", ha afirmado un portavoz del distrito de Saalfeld-Rudolstadt, en Turingia. Según ha indicado, todavía hay algunos focos de incendio aislados, pero se pueden combatir con relativa rapidez.
Estado de crisis declarado oficialmente
El anuncio ha llegado unas horas después de que se declarase el estado de crisis en la región ante la incapacidad del cuerpo de bomberos para controlar el mayor incendio forestal del estado en más de tres décadas. El olor del humo ha sido transportado por el viento hasta Berlín, situada a unos 300 kilómetros de la zona afectada.
Las corrientes de viento han sido uno de los principales enemigos de los equipos de extinción de incendios. Según un portavoz de Saalfeld-Rudolstadt, cuando finalmente se extinguía una zona en llamas, el viento encendía la siguiente a pocos metros de distancia.
Equipos de emergencia al límite
"Nuestras fuerzas están agotadas", ha afirmado el administrador del distrito, Marko Wolfram. El responsable ha expresado la esperanza de que el personal de emergencia pueda reducirse de 500 efectivos el domingo a 300 el lunes.
Un número similar de bomberos ha estado luchando contra las llamas en el norte de Sajonia, entre las ciudades de Dresde y Leipzig. Gran parte de las 2.800 hectáreas de paisaje natural de la zona de Gohrischheide ya han sido pasto de las llamas.
(DPA/EP) Nota: Este artículo ha sido editado con la ayuda de Inteligencia Artificial.
