La ONG de defensa de Derechos Humanos Cristosal ha anunciado este jueves que suspende sus operaciones en El Salvador tras 25 años de trabajo en el país centroamericano. La organización ha tomado esta decisión ante la escalada represiva de la Administración de Nayib Bukele contra los defensores de derechos humanos.
La ONG ha explicado que sus labores se han visto gravemente afectadas por "la escalada de criminalización de defensoras y defensores, la imposición de la Ley de Agentes Extranjeros y la débil independencia institucional". A pesar de esta suspensión, Cristosal ha asegurado que continuará su trabajo desde el exilio.
Operaciones desde Guatemala y Honduras
"Su trabajo continuará reorganizado y comprometido desde nuestras sedes en Guatemala y Honduras", ha comunicado la organización a través de un mensaje en la red social X. La entidad ha calificado esta decisión como "dolorosa" pero necesaria para proteger a su equipo y "resguardar su labor".
No obstante, Cristosal ha aclarado que no renuncia a su personalidad jurídica ni a su compromiso con El Salvador. "Hemos presentado nuestra inscripción en el Registro de Agentes Extranjeros porque la defensa de DDHH es irrenunciable", ha agregado la organización.
Denuncia del desmantelamiento democrático
La ONG ha denunciado que "el régimen de los hermanos Bukele ha desmantelado los principios básicos de la democracia". Según Cristosal, bajo un Estado de excepción permanente y con control casi absoluto de todas las instituciones, El Salvador ha dejado de ser un Estado de derecho.
"Expresar una opinión o exigir derechos básicos hoy puede costar la cárcel", ha advertido la organización. La propia Cristosal ha enfrentado "acoso legal y administrativo, espionaje, vigilancia de sus actividades y hogares, así como campañas de difamación".
Clima de miedo y control social
"Esta cultura de miedo --alimentada por rumores de listas negras, vigilancia, visitas policiales intimidantes y detenciones arbitrarias-- funciona como un mecanismo de control social", denuncia el comunicado de la ONG. La decisión de suspender operaciones llega meses después de la detención de Ruth López, abogada y defensora crítica con el Gobierno de Bukele.
López, que era jefa de la Unidad Anticorrupción y Justicia de Cristosal, fue acusada inicialmente por la Fiscalía de colaborar "en la sustracción de fondos de las arcas del Estado", aunque finalmente fue procesada por enriquecimiento ilícito. Cristosal ha reiterado que su arresto no es "un caso aislado, sino parte de una estrategia de castigo ejemplar para intimidar".
Estrategia de represión sistemática
"Ruth está presa por exigir transparencia y denunciar la corrupción. Como ella, muchas otras personas han sido criminalizadas por su labor o forzadas al exilio", ha añadido la organización. La ONG considera que la detención de López forma parte de una estrategia más amplia del Gobierno de Bukele para silenciar a las voces críticas.
(EUROPA PRESS) Nota: Este artículo ha sido editado con la ayuda de Inteligencia Artificial.