El presidente de la Junta de Andalucía, Juanma Moreno, defendió este miércoles la actuación «rápida» de su partido tras la detención de tres altos cargos del PP en Almería. Los detenidos son Javier Aureliano García, presidente de la Diputación de Almería, Fernando Giménez, vicepresidente de la institución, y Rodrigo Sánchez, alcalde de Fines. La operación de la Unidad Central Operativa (UCO) investiga presuntos pagos de comisiones ilegales.
Moreno reaccionó durante la presentación de su libro "Manual de convivencia" en Madrid. Aseguró que el partido suspendió cautelarmente de militancia a los tres detenidos «en medio día». El presidente andaluz admitió que recibió la noticia con «estupor y sorpresa» y la calificó como «desagradable y muy triste». Los detenidos fueron arrestados en la mañana del miércoles.
El líder andaluz subrayó el contraste con otros partidos. «El comportamiento nada tiene que ver con nuestro adversario», afirmó en referencia al PSOE. Moreno citó los casos de José Luis Ábalos y Santos Cerdán para marcar la diferencia. El presidente pidió respetar la presunción de inocencia de los detenidos y anunció que se tomarán más decisiones tras su comparecencia judicial.
La apuesta por la "vía andaluza"
Moreno aprovechó el acto para defender su estrategia política. Recordó las «negociaciones muy complicadas» que en 2019 permitieron su investidura con el apoyo de Ciudadanos y Vox. El presidente andaluz presentó esta experiencia como una «tercera vía» en un «momento de polarización».
«Es una vía intermedia, de primar la gestión, sin broncas ni ruidos», explicó Moreno. El presidente describió su objetivo de «superar» a la Comunidad de Madrid adoptando sus mejores prácticas. «Copiamos sus cosas buenas», señaló.
Moreno descartó un regreso a la política nacional. El presidente andaluz vivió 18 años en Madrid y fue secretario de Estado en el gobierno de Mariano Rajoy. Ahora se concentra exclusivamente en la gestión de Andalucía.
Nota: Este artículo fue creado con Inteligencia Artificial (IA).











