Kike García regresa este domingo al estadio de Mendizorroza, donde la temporada pasada fue el máximo goleador del Alavés con 15 tantos. El delantero viste ahora la camiseta del Espanyol, que ofreció al atacante un contrato de dos años y un salario cercano al millón de euros por temporada. El Alavés no igualó la oferta.
El técnico del Espanyol, Coudet, expresó su cariño por el jugador en la rueda de prensa previa al partido: «Le tenemos mucho cariño y queremos que marque muchos goles, pero más adelante». Se espera que los aficionados de Vitoria-Gasteiz reciban a su exgoleador con aplausos y admiración.
El Espanyol llega en un buen momento. El club celebró recientemente su 125 aniversario, aseguró su clasificación en la Copa del Rey y mantiene una sólida posición en la liga. El equipo se caracteriza por su defensa compacta, con Riedel y Cabrera aportando estabilidad, y un mediocampo efectivo liderado por Pol Lozano y Edu Expósito. El seleccionador nacional Luis de la Fuente sigue de cerca la evolución de Pol Lozano.
El reto para el Alavés
El Alavés es el equipo que menos goles ha encajado en la liga, pero afronta un problema: no ha marcado en sus últimos dos partidos. El conjunto vitoriano busca confirmar su estatus como equipo revelación de la temporada.
El técnico Manolo González cuenta con algunas bajas importantes. Garcés cumple sanción de la FIFA y Jon Pacheco está lesionado con problemas en el ligamento del hombro. Probablemente, Tenaglia y Parada deberán actuar como laterales reconvertidos para cubrir las ausencias defensivas.
Nota: Este artículo fue creado con Inteligencia Artificial (IA).





