Los padres de Sandra Peña comparecen este miércoles ante la Fiscalía de Menores de Sevilla como testigos del caso. La menor presuntamente se suicidó en octubre tras sufrir acoso escolar en el colegio Irlandesas Loreto. La declaración tiene lugar después de que la Policía Nacional haya entregado un informe sobre el presunto acoso.
El Ministerio Público ha abierto dos investigaciones paralelas. Una se centra en la posible participación de otros menores en los hechos. La otra examina las actuaciones del centro educativo y su posible responsabilidad. La Fiscalía también solicitó a una red social la eliminación de imágenes que identificaban a tres menores como presuntos acosadores.
Críticas al protocolo escolar
El tío de Sandra Peña, Isaac Villar, criticó la gestión de la escuela en una manifestación contra el acoso escolar celebrada el 6 de noviembre en Madrid. Aseguró que en el caso de su sobrina «no se llevasen a cabo» los protocolos de acoso escolar por parte del centro educativo, al tiempo que ha manifestado que, aunque no se puede saber con certeza si la aplicación de los mismos hubiese impedido el final de la joven, «sí se podría haber tomado medidas para intentar evitarlo».
La dirección del colegio privado concertado pidió «cautela y responsabilidad hasta que finalice la investigación». Según la familia, habían alertado en repetidas ocasiones sobre el acoso que sufría la menor.
Movilización estudiantil
El caso provocó una ola de protestas estudiantiles. El 28 de octubre, miles de estudiantes se movilizaron en 55 ciudades españolas. El Sindicato de Estudiantes convocó una huelga y manifestaciones para luchar «con el monstruo del bullying».
Nota: Este artículo fue creado con Inteligencia Artificial (IA).








