El presidente estadounidense Donald Trump amenazó con imponer aranceles «masivos» a los productos chinos en respuesta a las nuevas restricciones de exportación implementadas por Pekín. La medida responde específicamente a los controles sobre tierras raras que China anunció recientemente, los cuales Trump calificó como acciones «muy hostiles».
A través de su plataforma TruthSocial, Trump escribió que «¡están sucediendo cosas muy extrañas en China!». El mandatario acusó al gigante asiático de extender los controles de exportación «a prácticamente cualquier otra cosa que se les ocurra, incluso si no se fabrica en China».
Escalada de tensiones comerciales
Trump denunció que Beijing está enviando cartas a países de todo el mundo detallando los elementos afectados por las nuevas restricciones. Según el presidente estadounidense, esta decisión congestionaría los mercados globales y complicaría la situación económica mundial, especialmente para la propia China.
«Otros países se han puesto en contacto con nosotros, indignados por esta gran hostilidad comercial, que surgió de la nada», aseguró Trump. El mandatario expresó sorpresa por la decisión china, destacando que las relaciones bilaterales en los últimos seis meses «ha sido muy buena», lo que hace la medida «aún más sorprendente».
«Se están volviendo muy hostiles», acusó Trump, quien caracterizó las maniobras chinas como una estrategia para mantener al mundo «cautivo» mediante el control de elementos críticos.
Contramedidas estadounidenses
El presidente estadounidense advirtió que Estados Unidos posee «posiciones de monopolio» más sólidas que las chinas, aunque hasta ahora no había considerado utilizarlas. «Simplemente no he optado por usarlas; nunca tuve una razón para hacerlo, ¡HASTA AHORA!», escribió en su mensaje.
Trump indicó que Washington está evaluando múltiples respuestas a las acciones chinas. «Por cada elemento que ellos han podido monopolizar, nosotros tenemos dos», señaló el mandatario, quien confirmó que los aranceles masivos son solo una de las opciones consideradas.
«Hay muchas otras contramedidas que también se están considerando seriamente», advirtió Trump. El presidente defendió que las medidas, aunque «potencialmente doloroso», representarán «algo muy positivo para Estados Unidos».
Reunión bilateral en duda
La escalada de tensiones pone en riesgo la cumbre prevista entre Trump y el presidente chino Xi Jinping durante la reunión de la Cooperación Económica Asia-Pacífico (APEC). El encuentro estaba programado para celebrarse entre el 31 de octubre y el 1 de noviembre.
«Ahora parece que no hay motivo para hacerlo», declaró Trump sobre la posibilidad de reunirse con Xi Jinping. El mandatario calificó las acciones chinas como «una maniobra bastante siniestra y hostil, como mínimo».
Trump reconoció que la situación ha evolucionado de manera inesperada. «Nunca pensé que llegaría a esto, pero quizás, como con todo, ha llegado el momento», concluyó el presidente estadounidense.
Fuentes utilizadas: "Europa Press" Nota: Este artículo ha sido editado con la ayuda de Inteligencia Artificial.
